Tras un resultado electoral que le confiere al gobierno de Evo Morales Ayma más de dos tercios de los votos, los bolivianos refuerzan su apoyo a un proyecto de pais, desarrollo, y de cambios estructurales.
Bolivia posee la segunda reserva de gas probada en América del Sur, piedra angular de su proyecto de revolución social y democrática.
Un pais donde hace apenas dos años el estado no era siguiera "solvente" para pagar a los maestros, por citar un ejemplo.
El plan de erradicación del analfabetismo, los médicos cubanos y sus más de 250.000 operaciones
de la vista en el marco de la "Operación MIlagro", además de su labor como médicos integrales, el bono "Juancito Pinto" a las niñas y niños para luchar contra la deserción escolar, la "Renta Dignidad" o jubilación universal a los mayores de 60 años, créditos para la producción de trigo y maiz con 0% de interés, una necesaria reforma agraria, eso, entre un buen número de reformas y proyectos de construcción a corto, mediano y largo plazo, son un rumbo hacia un pais más justo y mejor.
Gobierno social y democrático, como pocos en el continente sino en el mundo, el gobierno boliviano le ha pedido a la ciudadanía que decida y vote. Ejemplo de democracia, cuando hace poco más de dos años había arrasado por goleada las elecciones "y con el arbitro en contra".
Pais que enfrenta el reto de la construcción de si mismo, después de siglos de saqueo y resistencia, donde aprender a leer y escribir era un privilegio para unos pocos y un delito para los demás.
Un pais cuyo presidente fue pastor de llamas, que ha sido ratificado con un 67,43% de los votos despues de dos años y medio de ejercio.
Y que enfrenta la virulenta oposisición de aquellos que no quieren que nada cambie.
Un pais donde los cambios son imparables como las estaciones.